EDWARD HOPPER: "Locomotora americana", 1944
Stephenson estaba seguro del futuro que esperaba al mundo con la
utilización del ferrocarril. Su invento había llegado para quedarse. Así se lo
describía a su hijo:
Al arte le fascinó el
ferrocarril. Era una metáfora de la vida… y estimulaba la imaginación de los
artistas que ampliaron su mundo de imágenes, de palabras, de sensaciones y de
vida.
El ferrocarril es la punta
de lanza en la revolución de los transportes. Comienzan a investigarse nuevos
medios de locomoción… y llegarán el barco de vapor, el automóvil, el avión… que ya formarán parte de las vivencias
cotidianas de los ciudadanos y no dejarán de perfeccionarse.
Nada será igual para el ser humano, nada será igual para el arte. La máquina se incorpora a su universo creativo. La máquina se convierte en objeto de representación artística. El cine, la fotografía, las artes plásticas, la música y la literatura convertirán al tren en protagonista de sus obras...
Nada será igual para el ser humano, nada será igual para el arte. La máquina se incorpora a su universo creativo. La máquina se convierte en objeto de representación artística. El cine, la fotografía, las artes plásticas, la música y la literatura convertirán al tren en protagonista de sus obras...
El diseño de
carteles de información y propaganda de las diferentes rutas del ferrocarril se
convierten a menudo en sugerentes obras de arte llenas de color y expresividad.
Diseñadores gráficos y pintores adquieren fama y prestigio a través de estos
reclamos publicitarios de gran calidad. Entre ellos destacan PROHASKA, RAY, PIERRE FIX-MASSEAU y,
sobre todo A.M. CASSANDRE
El ferrocarril se
convirtió en un escenario icónico para el cine. Lugar ideal para el despliegue
de un enorme caudal de sentimientos. Despedidas, encuentros y desencuentros,
misterios, soledades, alegrías y tristezas. Toda la vida cabía en un tren. Toda
la historia se podía reflejar a través de sus pasillos, de sus ventanillas,
dentro de sus departamentos… un lugar donde todo era posible.
El ferrocarril jugó un
papel clave en la unificación del vasto territorio de Estados Unidos. La
presencia del ferrocarril en el western era imprescindible. Un ejemplo notable
fue “El caballo de hierro”, un clásico filme de John Ford.
Numerosas obras literarias han sido
adaptadas al cine. Relacionadas con el ferrocarril se pueden destacar las de Patricia Highsmith, “Extraños en un
tren” y “Asesinato en el Orient Express”.
Fotógrafos de prestigio se dejaron seducir por la vitalidad y el simbolismo que el ferrocarril aportaba a la vida y dejaron su impronta a través de imágenes únicas que han pasado a formar parte del patrimonio fotográfico.
No hay que olvidar que el inicio de la fotografía creció paralelo al desarrollo del ferrocarril. Ambos inventos fueron testimonio del comienzo de una nueva era. Hasta la actualidad no han dejado de perfeccionarse.
Obra del reconocido fotógrafo estadounidense Stieglitz, del año 1903 que se exhibe en el Museo Metropolitano de Arte de Nueva York- donde se ve una locomotora de vapor andando por los raíles de Long Island.
Fotógrafos de prestigio se dejaron seducir por la vitalidad y el simbolismo que el ferrocarril aportaba a la vida y dejaron su impronta a través de imágenes únicas que han pasado a formar parte del patrimonio fotográfico.
No hay que olvidar que el inicio de la fotografía creció paralelo al desarrollo del ferrocarril. Ambos inventos fueron testimonio del comienzo de una nueva era. Hasta la actualidad no han dejado de perfeccionarse.
Obra del reconocido fotógrafo estadounidense Stieglitz, del año 1903 que se exhibe en el Museo Metropolitano de Arte de Nueva York- donde se ve una locomotora de vapor andando por los raíles de Long Island.